El otro día, mi media naranja y padre de Querubín comenzó durante la comida a interrogar a nuestro ángel sobre su futuro académico. El próximo curso tiene que elegir optativas de ciencias o letras y queríamos saber hacia donde puede querer dirigirse.
-"¿Qué carrera te gustaría estudiar?", le preguntó su querido padre.
-Uhmmm, no sé, comenzó a pensar Querubín. "Yo quería ser médico, pero... creo que no, que no me apetece estudiar tanto. Igual...astronauta"
- "Bien, le contestó impertérrito su padre, me parece muy apropiado ya que habitualmente estas en la luna".
- "Que era broma", le dijo Querubín. "Mejor algo de Educación Física"
- "Para eso te vas a tener que preparar mucho que las pruebas de entrada al IVEF son muy duras", le contestó su padre -dispuesto a enfrentar a nuestro niño con la dura realidad-.
- Querubín se lo pensó un poco y sentenció: "Vale, pues arbitro de baloncesto que a los de fútbol les pegan a la salida".
Yo me quede muy satisfecha, uno de sus amigos quiere ser o cajero de burger king o el que abrocha los cinturones en Port Aventura. Bendita reforma educativa.
Creo que debes darle algún margen para que defina su futuro, con esta edad es difícil pensar en él.Lo que es importante y creo que tiene claro es el concepto de esfuerzo que debe emplear para conseguirlo... es un comienzo. Mi retoño decidió ser hijo, que es otra opción.
ResponderEliminar